¿Por qué fracasan las empresas? supervivencia empresarial
Según un estudio publicado por Confecamaras en agosto de 2017, “en países de la OCDE y América Latina, más de la mitad de las empresas nuevas fracasan en los primeros cinco años de vida. Sólo en el primer año desaparecen, en promedio, entre el 20 y 30% de las empresas nacientes. A partir de este año el porcentaje de compañías que mueren aumenta aproximadamente 10 puntos porcentuales cada periodo, de suerte que, después de cincos años solo permanecen activas cerca del 50% de estas firmas.”
Si bien el tamaño con el cual las empresas inician sus operaciones es un factor interno o específico de la firma, es importante advertir que muchos negocios empiezan pequeños no porque así lo elijan, sino porque las restricciones de recursos los obligan a empezar sus operaciones con una menor escala.
Dentro de los determinantes de la supervivencia empresarial, encontramos 3 factores.
Estos a su vez cuentan con índices que deben ser tenidos en cuenta por las empresas en su afán por la continuidad empresarial, 2 indicadores que deben ser tenidos en cuenta son:
Las cuales van de la mano y deben trabajar de manera armónica. Si bien, todas las organizaciones se ven obligadas en sus relaciones comerciales a dar prerrogativas financieras a sus contratantes, como lo son:
Es importante señalar que con un apoyo jurídico a cada una de las operaciones mencionadas, se disminuiría ostensiblemente el incumplimiento permanente tanto en el pago de las facturas vencidas, como en el cumplimiento de las obligaciones contractuales.
Es por esta razón que GLAW – Guardianes Jurídicos, ha centrado sus esfuerzos en brindar a las empresas de éste país una protección legal que sirva para reforzar la imagen de seriedad y eficiencia de la empresa y asegura el cobro antes que a otros acreedores.
De igual manera, ante los contratos que por diferencias conceptuales quedan en el limbo jurídico para las empresas, así como también los desequilibrios económicos, nos hemos formado con el fin de ofrecerles un servicio que permita dirimir dichas diferencias (en lo posible) antes de llegar a instancias judiciales, y de ser necesario realizar el acompañamiento judicial necesario para salir adelante con dichas diferencias contractuales y de esta forma recuperar cuantías que podrían ser importantes para la continuidad de la empresa en el tiempo.
Contáctese con nuestro equipo de consultores y evite que sus esfuerzos por sacar su compañía adelante se pierdan.